Por qué el equipo de GHL consigue un comprador en menos de cinco visitas.

Superficialmente, todo parece simple. Sin embargo, no todas las agencias saben lo que realmente es importante. “En realidad, solo tienes que dejar de hablar como intermediario”, así comunica el cofundador de GHL, Phil Gould. “No somos vendedores, sino personas que ofrecen ayuda”. Tenemos que escuchar, eso es lo realmente importante.
Al hacerlo, uno no solo debe prestar atención a lo que el cliente dice, sino también a cómo reacciona ante una propuesta u otra. Y eso es exactamente lo que hace el equipo de GHL. Por lo tanto, es posible encontrar la persona ideal para cada inmueble en menos de cinco visitas.

Normalmente, se requieren entre ocho y catorce visitas para vender una casa, nosotros lo conseguimos antes que la media debido a que conocemos a nuestros clientes con anticipación. No nos gusta perder el tiempo ni hacérselo perder a nuestros clientes.
Elizabeth Dunn, profesora de psicología de la Universidad de Columbia Británica, ha estado trabajando en el tema de las expectativas y la realidad. El experto encontró que aquellos que se enfocan en comprar propiedades, basándose en aspectos como el tamaño o el entorno social, terminan arrepintiéndose de su decisión. “Conocemos muy bien la isla”. Para algunas personas el descanso en el campo es lo ideal, mientras que otras necesitan más contacto con el bullicio y ambiente de la ciudad. Es por este motivo por el que nos gusta conocer a nuestros clientes y saber aconsejar a la perfección el lugar que deben escoger para su hogar de ensueño.
“Hacemos preguntas y escuchamos”. Le preguntamos al cliente cómo se imagina su futuro y su vida en la isla. Debido a esto, podemos determinar la ubicación de la casa y el estilo arquitectónico.